Un paso atrás.

 Anoche fue una de esas raras noches en que logré dormir completo y de un "solo jalón".  Pareciera que hace semanas perdí la capacidad de dormir y hasta olvidé cómo hacerlo.  Lo cierto es que hoy al levantarme a las 5 de la mañana para mandar a mis hijas al colegio y que estuvieran comidas, vestidas y de buen humor, no pude dejar de pensar en alguien que conozco: ella está enamorada de un hombre casado.

Hace días que me despierto a las 2 de la mañana dando vueltas en la cama. A veces me quedo planificando lo que debo hacer el día siguiente y cuál es el camino más corto para completar las cosas pendientes.  A veces simplemente quisiera despertar al que duerme a mi lado para que hablara un rato conmigo y tranquilizara mis ideas.  Pero debo conformarme con ver dormir a los que amo, esperando que tengan sueños preciosos.  Digo todo esto porque soy casada, porque entiendo.

Tengo amigas que se escandalizarían por semejante alusión y/o situación de enamoramiento.  Soy de las que piensa que enamorarse es una decisión consciente que tomas según te convenga:  casados, solteros, gays, problemáticos, masoquistas, blancos, negros, chavistas, y/u opositores extremos.  Mi teoría de vida me dice que enamorarse es algo que eliges conscientemente.  No es algo que heredas, que te llega solo, que pasa como en los cuentos de hadas que con solo un beso viven felices para siempre.  Para mí, enamorarse es un proceso no siempre fácil (estemos claros) pero que escoges según tus necesidades, tus capacidades, tu estilo de vida, tus creencias, tu sentido práctico y tu disponibilidad. Ahora, luego de que estás enamorado... la cosa es completamente diferente.

Los que me conocen saben que no soy de las que juzga.  Al menos no en cuestiones románticas.  La vida me ha demostrado que hay "sopotocientas" escalas de grises dentro del blanco y dentro del negro.  Que juzgar es solo perder el tiempo que tienes en aprender de alguien o de algo. ¿Quién a definitivas cuentas, soy yo para juzgar?  Prefiero pensar que es mejor estar enamorada de un hombre casado, que no haber estado enamorada nunca.

Ya lo sé... el tipo es inteligente, lindo, simpático y con excelente sentido del humor, interesante, preparado, sensible, económicamente sustentable... y por todas esas razones... ¡coño,  está casado! Aquí el problema no es su estado civil, aquí el problema es como se siente usted con eso.  Las estadísticas (y las personas casadas que uno conoce) demuestran que en el 99,9 % de los casos, los tipos encantadores, casados y económicamente sustentables JAMÁS dejan a sus esposas. Digo "jamás" porque en primer lugar siempre está por encima de todo muchas vainas tales como:  "no pienso dejar mi casa y mucho menos darle a mi mujer el 50% de lo que he pagado"; "es delicioso tener alguien que me cocine, me cuide, me lave, me planche, y me dé estatus"; "ni de vaina le oigo la lengua a mi mamá o a mi suegra"; "mis hijos están chiquitos y ya van a comenzar los rollos de las visitas y el drama familiar de una separación"; "voy a pagar manutención de por vida"; o la famosa frase de "es que mi mujer me hará la vida imposible luego de que la deje".

Aquí no importa si el "sapo casado encantador" (que está más cerca de ser un príncipe que cualquier otro), vive dentro de una relación que ya no camina derecha; que no tiene lo que buscó cuando se casó o si de verdad se enamoró de nuevo y de USTED.  Usted posiblemente tenga una "montaña de cualidades" que podrían moverle el piso a más de uno, casado o no. Lo que trato de decir es, que usted debe observar como se siente.  Usted debe observar si este sentimiento hermoso y maravilloso que siente, es a la vez fuerte para soportar que ese hombre jamás dormirá con usted ni le velará el sueño cuando tenga insomnio.  Que ese hombre no estará con usted en las navidades, en los cumpleaños, en las graduaciones, en el día de su cumpleaños o en los momentos en que usted siente que el mundo se le caerá encima y necesita a alguien que se cale "su llantén".

Usted debe evaluar si lo que obtiene a cambio de ese amor que USTED HA DECIDIDO ELEGIR  es suficiente para lo que quiere de la vida.  Porque conozco a varias que están felices con ser "la otra":  que no cocina, que no lava, que no atiende cuestiones domésticas como "la camisa perfectamente planchada, buscar la ropa a la tintorería, pagar las cuentas, llenarse de niños gritones y necios y calarse a la suegra insufrible", y se sienten dichosas.  El tiempo que "él" les da, es para salir, para sexo ardiente y perfecto, para comidas románticas, para conversaciones intelectualmente inolvidables, etc etc etc. ¡No puede pedirse más cuando se está tan clara en la vida!

¿Y qué pasa cuando ella también está casada?... Pues aquí la cosa se complica.  Ya no es uno solo el que debe pensar si dejará su casa, su hogar, sus ventajas económicas o sus hijos.  Aquí se trata de dos personas que se encontraron en un momento y en un espacio que los ha reunido para completar lo que no tenían en sus vidas. Es como si repente el universo conspiró para darles una lección.  Para repetirles que aún tienen chance y que depende de cómo quieran manejarlo o no.  Las relaciones de 4 nunca terminan bien.  Eso va más allá de las estadísticas. Mi pregunta es ¿no le parece extraño que dos personas casadas están enamoradas de alguien que no es su mujer o marido?... si esto pasa ¿lo mejor no es que estén juntas ya que tuvieron la suerte de encontrarse?...

Pues aquí la cosa sigue complicándose.  Es posible que ambos o al menos uno de ellos quiera su relación "extra-matrimonial" tal como está.  A lo mejor él o ella que es casado o casada, le gusta su vida tal como es:  tiene a su esposa, a su hijo y/o hijos, su trabajo, su casa, su familia, y "su relación aparte" tal como él quiere. Opino que eso está bien si funciona para él y ambos están claros. Todo esto siempre y cuando él le  no vaya por la vida prometiendo cosas que a la otra persona nunca le llegarán. Eso no es justo.

 También es posible que ella no quiera que él deje nada.  O peor aún, tal vez ella espera que algún día él tenga "los cojones" de decidir si es ella, si es la otra, o si no es nada al fin y al cabo.  El amor cuando se comparte con más de uno en cuestiones sentimentales,  es delicado y frágil. Por eso es tan importante hablar; ponerse de acuerdo y decir abiertamente qué es lo que se quiere y espera.

Amiga lectora, amigo lector... ¡los cachos son dolorosos!, créame... Si usted siente que se ha enamorado de quien no debe, ya sea porque usted es casado o porque usted cree que es mal momento, pues de un paso hacia atrás. A veces cuando retrocedemos un poco podemos vislumbrar mejor el horizonte.  Usted ya está enamorada y posiblemente enceguecida.  Aquí no hay amigas brujas que la puedan sacar de "este paquete".  Es más, posiblemente no tenga la suerte de encontrar otras princesas que entiendan su relación, sino de que la juzguen y la hagan sentir poco menos que una "cucaracha roba-maridos insensible y bruja".  Solo usted sabe la cruz que lleva, y si es a gusto o a disgusto.

Sigo pensando que a quien debemos serles fiel en todo momento es a NOSOTROS MISMOS. Que es lo que se piense de lo que uno hace o siente lo que de verdad importa. Siempre le he dicho a mi marido que si "encuentra a una mejor que yo y que le dé donde le gusta mejor que yo", pues que la amarre de la pata de la cama y LISTO. ¡Zaz! la vida es corta y vivir atado a alguien que ya no nos "hace tilín" porque se tienen hijos o porque hay que empezar de nuevo a conseguir los reales de una nueva casa, o porque "mamá y papá" nos matarán si nos divorciamos... ¡NO ES VIDA!

Por supuesto que lo ideal no es que usted sea LA TERCERA.  Las parejas son "de a dos".  Un tercero nunca será una pareja.  Pero... ¿quién soy yo para decirle si usted obra bien o mal?... ¿quién soy yo para decirle: "¡Déjelo! y busque a alguien más accesible" ?, pues nadie.  La vida da vueltas y vueltas.  Hoy creemos que estamos arriba, pero es posible que mañana estemos abajo y otros estén arriba de nosotros.

Es una suerte el hecho de que usted sienta amor y mariposas y todas esas vainas que nos hacen la vida emocionante.  Malo es ir por la vida dormido de pies a cabeza, conformándonos con sexo casual escaso y millones de amigos interesados. Yo no puedo decirle que hacer.  Yo solo puedo decirle una cosa y lea bien amigo lector o amiga lectora...

No lo deje si lo ama de verdad; al menos no aún,  ni después de leer esta vaina. Dé un paso atrás y mire de nuevo.  Compruebe que usted está hecha del material poderoso que necesitará para afrontar todo lo que viene después.  Si usted lo posee, pues siga y espere.  Si usted quiere más y no es ni medianamente resistente, pues este paso atrás la ayudará a establecer sus prioridades.  Al fin y al cabo, se trata de como usted quiere LLEVAR SU VIDA.  Es lo único que tiene... ¿o no?

ES BUENO VIVIR EN EL AQUÍ Y EN EL AHORA, pero a veces, UN POCO DE PLANIFICACIÓN Y METAS SON EN REALIDAD LAS QUE NOS DARÁN EL PRESENTE-FUTURO QUE TANTO ESPERAMOS.